¿CONSENSO? 18.8.2025
Las vacaciones son una oportunidad magnífica para meter la nariz en otros lugares del mundo más allá de los circuitos turísticos establecidos. En una escapada por la Europa más desarrollada he sentido mucha envidia al ver el estado de las redes de transportes públicos. “Impecable funcionamiento”, “oferta variada”, “confluencia de varios tipos de transporte”, “frecuencia abrumadora”, “puntualidad absoluta” son algunos de los sintagmas que puedo utilizar. Esto es sin contar medios menos comunes como la bicicleta. Por ejemplo, en una ciudad universitaria media de los Países Bajos, he visitado un parking que acoge a trece mil bicicletas. ¿Podemos imaginar la cantidad de coches y de monóxido de carbono que se ahorran?
En España llevamos varios años sufriendo el deterioro progresivo de los medios de transporte. Hay retrasos, averías, caos y demás catástrofes que sufrimos los ciudadanos y que da una imagen lamentable hacia el exterior. Y lo peor es que nos estamos acostumbrando.
De forma más localizada, hay ciudades y áreas que han despegado y ofrecen servicios de calidad. Y les va muy bien. Winston Churchill ya lo tenía claro hace casi un siglo: “Un país que construye carreteras de calidad se pone a sí mismo en la vía del progreso”.
Suelo viajar por Andalucía Oriental y observo cómo otras provincias están invadidas por las obras y en un futuro cercano contarán con una impresionante red de transportes de todo tipo, AVE incluido. Así lo señaló también el periodista José Luis Adán en la gala de los premios Ideales 2025. Habló de los pasos que se dan en otras ciudades mientras nosotros seguimos debatiendo. Defendió la necesidad de diálogo, pero también de acción y decisión.
Parece que en Jaén estamos esperando que todas las administraciones sean del mismo color para llegar a acuerdos y, ante esa imposibilidad, seguimos estancados sine die mientras que en otros lugares con gobernantes variopintos no dejan de avanzar.
Sin embargo, me vuelvo a ilusionar con las noticias de este verano: se habla de consenso entre las tres administraciones (local, autonómica y nacional). Se ha renovado la flota de autobuses con nuevos vehículos híbridos más modernos y ecológicos. Por otra parte, los jienenses han duplicado el uso del autobús urbano. En cuanto al tranvía, ya tiene todos los contratos para su mantenimiento. Catorce años después no está mal. Se ha firmado el protocolo para integrar el tren en la ciudad y siguen hablando de una posible intermodalidad. Además, la Junta también ha aprobado el Plan de Transporte Metropolitano de Jaén, integrando a más municipios y buscando mejoras medioambientales. Todas parecen buenas noticias.
Ante tanto avance y compromiso, pareciera que estamos en campaña electoral. Ojalá que estas halagüeñas previsiones se hagan realidad y no sean un espejismo veraniego. Me ilusiona ver en Jaén lo que Víctor Hugo defendió en un rotundo aforismo: “Abrid caminos y se abrirán pueblos”. Esperemos que esta vez todos estos proyectos alcancen la calidad y la velocidad que Jaén necesita y no nos quedemos otra vez, resignados y taciturnos, sentados en el andén.